El equipo de Simeone no tiene límites. En el Vicente Calderón se vivió una noche mágica, de esas que se recordarán en la historia del club tras golear al AC Milan por cuatro a uno. Dos de los goles colchoneros fueron de Diego Costa, que recordó al gran Van Basten con un vuelo acrobático para batir a Abbiati. Sin duda, el hombre del partido. El sueño por el viejo continente continúa..
Courtois: 8
El belga no tuvo excesivo trabajo durante el encuentro del Milan. En el gol no pudo hacer gran cosa, pues Kaka remató a placer tras el despiste de la zaga. El portero sigue a un gran nivel y todos los tiros que llegaron a la meta rojiblanca fueron atrapados, evitando la posibilidad del rechace.
Juanfran: 6,5
El lateral no jugó al nivel que esperado, en más de una ocasión tuvo que emplearse a fondo para solventar sus propios despistes defensivos. El fallo más importante fue en el gol milanista, cuando perdió la marca de Kaká y dejó que el brasileño rematase solo en el segundo palo. A nivel ofensivo estuvo muy activo con llegadas constantes a la línea de fondo y con centros muy buenos al corazón del área.
Miranda: 8
Secó a uno de los mejores delanteros del mundo, Balotelli, llegando a desquiciar al italiano tras adelantarse una y otra vez en todas las acciones. El brasileño estuvo impecable en sus entradas por bajo y a nivel aéreo estuvo correcto. Gran partido.
Godín: 7’5
El uruguayo nunca falla, siempre realiza grandes partidos y, sobre todo, ante equipos de esta envergadura. Ante el Milan peleó, luchó como siempre. Demostró jerarquía la hora de pedir esfuerzos defensivos a los centrocampistas. Salió victorioso en su particular pelea con los ariete milanistas.
Filipe: 7
Le tocaba bailar con la más fea. El brasileño tenía la misión de frenar al mejor jugador del equipo rival en la ida, Taarabt, y lo cierto es que cumplió. Aunque que la jugada del gol se creó en su banda, donde el atacante centró con toda tranquilidad, la actuación del brasileño fue aceptable. Tras la reacción atlética el lateral se contagió y comenzó a mejorar a medida que trascurrían los minutos. En ataque estuvo bien, con buenas internadas y realizando constantes paredes con Arda y Koke.
Gabi: 9
No hay palabras para explicar el partido de Gabi. El capitán se empleó a fondo para recuperar balones, ayudar a Mario, presionar en la salida de balón milanista, participar en las jugadas de los goles y, si hacía falta, echar una mano en defensa. Es decir, el auténtico todoterreno colchonero. Nadie mejor que él para representar los valores de este Atleti con intensidad, lucha y liderazgo.
Mario: 5’25
No fue uno de los mejores partidos del internacional. En la primera parte estuvo algo despistado y eso le costó llegar tarde a muchas acciones, con el balón en los pies estuvo espeso y en algunos momentos parecía necesitar ayuda de Gabi para sacar el esférico con soltura. La segunda parte fue otra historia, mucho mejor posicionado en el campo y con bastante más soltura que en el primer acto, sacó a relucir su poderío aéreo y el cuerpo a cuerpo ante De Jong o Essien. Fue un partido de menos a más para un jugador que viene de una larga lesión.
Arda: 8’5
El turco es la pieza clave de este equipo, es quien pone la magia y se encarga de levantar a los aficionados del Calderón de sus butacas. Ante el Milan firmó un gol importantísimo que servía para dejar las cosas claras y evitar una remontada del equipo italiano. Turan movió al equipo a sus anchas, regateó, combinó con criterio y dio ese toque de calidad en algunas acciones que le diferencian del resto de jugadores.
Koke: 8
El canterano no se acobarda ante nadie. En el minuto dos dio una asistencia a Costa para que rematase a placer. Otra más. Koke destaca por su capacidad en el último pase, pero frente al Milán se encargó de ayudar en tareas defensivas y de hacer rápidas triangulaciones con Arda que ayudaron a oxigenar la medular y a llevar peligro sobre la meta de Abbiati.
Raúl García: 9
Se ha metido a toda la afición atlética en el bolsillo a base de sudor y sacrificio. Raúl es el prototipo de jugador que gusta a Simeone, un hombre luchador que se deja todo en el campo. En el gol de Arda, él fue quien mató el esférico con el pecho para cedérsela al turco; intentó una chilena que de haber sido gol hubiese sido el mejor tanto del campeonato y por si fuera poco marcó su gol de cada día. Partidazo del navarro que acabó ovacionado en una noche mágica para el equipo.
Diego Costa: 9,5
El delantero rojiblanco es de otro planeta, él se dedica a meter goles y el AC Milan lo sufrió en sus carnes. En dos partidos les ha anotado tres tantos. Abrió el marcador con un remate acrobático que hizo recordar ese vuelo de Torres frente al Betis o del mítico gol de Van Basten. Palabras mayores. El segundo, ya con el Milan muerto, tras una combinación con Sosa, cruzó el esférico a Abbiati para provocar el éxtasis rojiblanco. Él es el pichichi del equipo en Champions, el encargado de pelearse con todas las defensas. Sin duda, el partido del internacional español fue para enmarcar.
SUPLENTES
Sosa: 7
Entró por Raúl García y no lo hizo nada mal. Asistió a Costa en el cuarto gol de la noche tras una buena jugada de ambos. Se posicionó en banda derecha y ayudó al equipo con balones largos a la espalda de los defensas. El argentino dejó buenos detalles de calidad en la banda, aprovechó los escasos veinte minutos que le dio Simeone.
Cebolla Rodríguez: 6
A falta de doce minutos el técnico le dio entrada en el campo en lugar de Arda Turan. El uruguayo jugó escorado en la banda izquierda y se encargó más en ayudar en tareas defensivas que de atacar. El equipo aprovechó su velocidad para salir a la contra.
Diego: 5
El brasileño no termina de encajar en los planes de Simeone. Ayer disfrutó de escasos ocho minutos, poco tiempo en el que no pudo exhibir sus cualidades. Lo hizo bien en el tiempo que estuvo sobre el campo, abriendo el balón a la banda y tocando con Sosa en el centro del campo. No tuvo tiempo para más.
TÉCNICO
Simeone: 10
El técnico es el artífice de todo esto, de que todos los aficionados rojiblancos sigamos soñando con los ojos abiertos. Él ha sido quién ha transformado un equipo perdedor y lo ha convertido en uno de los mejores de Europa. El mérito es sólo suyo y nadie se lo puede quitar. Frente al Milan el Atleti mantuvo la presión e intensidad que tanto caracteriza a este equipo, ahogó al rival en el centro del campo y voló en las jugadas de ataque. Partido a partido, ya se ha colado entre los ocho mejores.
Escrito por: Antonio Rodríguez @nonorp
Foto: Club Atlético de Madrid.